Hola, se me vino un recuerdo cuando tenia 15 años y vivía en unos edificios de departamentos; me llamo Filipiño y esta es mi nueva historia.
Mis papás siempre salían de carrete los sábados en la noche y yo aprochaba que quedaba solo y buscaba a una vecinita de 14 años que vivía en la otra entrada del mismo edificio; tenía un leve retardo pero casi nada; y antes que salieran mis papás yo la buscaba a escondidas de su mamá y le decía que estuviera cerca merodeando porque la iba a invitar a mi casa y le daría algo rico para comer y tres mil pesos de entonces (año 1984); no era bonita pero tenía unas ricas tetas duritas y unos ricos pezones; la fui a buscar abajo y la llevé a escondidas a mi casa, le di un pedazo de queque y bebida, y le dije que fuéramos a mi pieza; era fácil comenzar a tocarla porque se reía y creía que era un juego, yo le subía su polera y me iba de una a sus ricas tetas, y las chupaba mientras la tendía en la cama; yo estaba a mil por hora de caliente, y montado arriba de ella comenzaba a subir su falda, la acomodaba en la cama y ponía en cuatro, ella nada decía y mientras bajaba sus calzones le podía ver su concha bien peludita, que comenzaba a masajear y meter mi dedo sin delicadeza alguna porque a esa edad la calentura me la ganaba; yo había debutado a los 11 años y algo tenia de experiencia; asi que la ponía en cuatro y con alguna dificultad finalmente lograba metérselo, ella se quejaba y no decía nada, yo me movía detrás de ella y se lo iba metiendo cada vez más adentro; recuerdo que estábamos en lo mejor cuando escuchamos a su mamá que la llamaba pero no sabía donde estaba; yo no la deje ir y le dije que si salía de mi casa la retarían ñ, que esoeraramos y asi polideportivo seguir culeándola, le di duro en cuatro patas, sonaba mi cuerpo en el culo de ella, aunque tenía esa dificultad menor yo encontraba que tenía una rica vagina apretada y que me hacía gozar y que cuando me venia el placer era endemoniado, yo acababa dentro de ella irresponsablemente; yo tenía papel a la mano y la dejaba bien limpia y le decía que me tenía que chupar el pico para que no quedara embarazada; era una media hora que aprovechando la ausencia de mis papás y mi calentura, me sacaba toda leche para no pajearme tanto en la semana; aprovechamos que su mamá andaba por otro lado y bajamos y ella nunca decía donde andaba o con quien; yo sabía que había algunos amigos que hacia lo mismo, pero no tenían experiencia y solo la manoseaban; yo por lo menos dos veces al mes me la llevaba a la casa y le daba su rico culion; incluso comencé a culiarmela de frente poniendo sus piernas se mi flectadas como lo vi en una porno; le entraba todito y yo me tenía que contener para no irme cortado tan rápido.
Esa fue mi experiencia que nadie nunca supo, solo yo y ella; después se fueron del barrio y nunca mas supe de ella, pero aún recuerdo esos momentos y como me gustaría volver a vivirlos.
Felipiño